El jardín de las delicias ¡Datos curiosos de la obra!

El jardín de las delicias, una enigmática y curiosa obra artística, que fuera pintada por el ingenioso pintor neerlandés Jheronimus Bosch, El Bosco. La pintura representa ser desde su realización hasta la presente fecha, una obra que encierra misterios de la creación del cosmos.

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El jardín de las delicias: Ingeniosa obra y sus curiosidades

El jardín de las delicias, nombre que se le otorga a una de las más famosas obras del pintor neerlandés de nombre Jheronimus Bosch, popularmente conocido como el Bosco. Es una obra realizada en forma de tríptico, pintado al óleo, sobre un trozo de madera con medidas de 220 x 389 centímetros, conformado por las siguientes medidas, tabla central con 220 centímetros x 195 centímetros, más dos laterales que sus medidas son 220 x 97 centímetros cada uno, las que se cierran en su tabla central.

El jardín de las delicias una obra de arte con un gran significado por sus símbolos plasmados al que se le han atribuido cuantiosas interpretaciones, entre ellas la han calificado como El carro de heno o la Mesa de los pecados capitales. Esta obra fue obtenida por el rey Felipe II de España, quien ha sentido gran admiración por el pintor. Le puede interesar Máscaras africanas

La obra fue resguardada por un buen periodo en el Monasterio de El Escorial. Es probable por una acción de moral y sarcástica que haría fortuna en sus tiempos, como puede evidenciarse en muchas réplicas por imitadores.

Esta obra es considerada como maravillosa, enigmática y además seductora de la historia del arte. La pintura se exhibe continuamente en el Museo del Prado de Madrid, lugar a donde se llevó en el año 1939 para resguardarla como parte del Patrimonio Nacional.

Es una obra de arte donde el pintor muestra desde criaturas mezcladas en actividades no precisas, maquinarias, el cosmos, aves y otros elementos, que fue realizada hace aproximadamente más de 500 años.

En la actualidad, a pesar de que se puede obtener datos acerca de obras de artes que marcan la historia suele ser asombroso que hoy en día no se conoce mucho sobre el Jardín de las delicias. Su autor El Bosco, fue un erudito del arte del Renacimiento flamenco temprano, y gran parte de su obra está envuelta con sentido impresionante.

La pintura al mantenerse cerrada se observan dos paneles en donde se muestra el tercer día de la creación del universo. Una vez que se abre, los tres paneles interiores personifican el paraíso, la vida terrenal, siendo el jardín de las delicias, y el infierno.

La pintura de oleo: Método novedoso cuando se pintó la obra

El maestro, El Bosco, elaboró su obra El jardín de las delicias, con colorantes al óleo sobre paneles de madera de roble. Para ese entonces, la pintura al óleo, no alcanzaba aún los 100 años.

Según menciona, Giorgio Vasari, arquitecto, pintor y escritor italiano, el artista flamenco conocido Jan Van Eyck, desarrolló la técnica aproximadamente para el año 1410. Aunque Van Eyck, no fue quien originalmente hizo pinturas al óleo, sin embargo, sí fue el que le añadió materiales especiales para adherir elementos y colorantes, permitiendo la fijación de los pigmentos.

Obra de El Bosco: Éxito pronto

La primera vez que se conoce sobre la obra del Jardín de las delicias, fue en el año 1517, un año luego del fallecimiento de su autor El Bosco. Para esos tiempos, se exhibía en el palacio municipal de los condes de la Casa de Nassau en Bruselas.

Estaba colocado en un lugar estratégico, para que sobresaliera ante la mirada y visitas de líderes de Estado y de otros magistrados, lo que significa que la obra contaba con un valor cuantioso para ese instante.

Se desconoce para quién fue pintado: No se realizó en un retablo

Con el gran contenido de imágenes todas desnudas, que se observan en el panel central, no se puede probar que la pintura estaba elaborada como una obra religiosa. A pesar que las imágenes, no muestran que están realizando actos sexuales evidentes, la escena con alteraciones profundas ha sido, algo dramatizada en el argumento religioso.

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Quizás la obra fue realizada por un encargado de un patrocinador privado. Es bueno mencionar, sobre expresiones acerca de la obra, la declarada por la doctora Sally Hickson, profesora de historia del arte en la Universidad de Guelph, quien detalla la obra de El Bosco, como “una especie de cine en casa renacentista para clientes ricos”

El jardín de las delicias: Un título errado

Es conocido de esta manera por parte del público, nombre que popularmente se conoce la pintura, pero, lo más cierto no es verdadero. El jardín de las delicias, narra el panel central de la obra, sin embargo, es el nombre moderno que recibe.

“Detail garden of earthly delights triptych Bosch”

“Paneles izquierdos y derecho de “El jardín de las delicias”

La pintura y su forma especial para ser leída

Puede ser factible, que el tríptico fue destinado para ser leído de forma de izquierda a derecha, debido a que sus símbolos tienen su propio significado en cada panel que están conectados entre sí.

Se puede evidenciar claramente en el panel exterior del lado izquierdo, muestra a Dios quien le presenta a Eva a Adán, mientras que el panel derecho, se evidencia los suplicios del infierno. Mientras que en el panel central, siendo el más conocido, y el que le otorga el título a la obra.

En este jardín tiene como fin mostrar las tentaciones surrealistas y valientes de la tierra. Con esta forma de lectura de izquierda a derecha, se puede apreciar la manera de cómo fue el génesis del hombre, de cómo vivió, y que más tarde se frustró a causa de su propia actitud.

Los paneles cerrados: Una admiración

Una vez que los paneles izquierdos y derecho, se encuentran cerrados, es probable visualizar en la parte exterior del tríptico que Bosch pintó la obra en grisalla, lo que significa una técnica pictórica en una pintura monocroma (de un solo color)  que genera un efecto de estar en un relieve escultórico.

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Esta técnica de grisalla era utilizada, para la época con frecuencia en los retablos holandeses, para pintar la parte exterior de los paneles, con la intención de que contrastará con el colorido de su contenido interior.

La obra el jardín de las delicias muestra al cosmos con descripciones extraordinarias que envuelven a la tierra. En la parte superior izquierda, en la esquina, se puede evidenciar la pequeña imagen de Dios, quien tiene una tiara o sombrero cónico papal. Acompañando un escrito del Salmo 33:9, que exclama: “Porque él dijo, y fue hecho; Él mandó, y existió”.

La enigmática pintura, ha sido dilucidada como una personificación del tercer día de la Creación, luego de la formación de la vida vegetal, sin embargo, es previo a los seres humanos y a los animales, o del diluvio universal, apreciándose que la mitad de la tierra está rodeada de agua.

La obra de arte y el artista pintado dentro de ella

A pesar, que no se conocen mucha información que hable de la vida y obras de Bosch, lo que ha sido difícil confirmarlo, muchos tienen la creencia que el artista, insertó su autorretrato dentro del panel del infierno. Es una teoría, planteada por primera vez por el conocido especialista en historia del arte medieval y renacentista, Hans Belting, quien lo plasma en su libro de pintura.

Se puede apreciar claramente en la curiosa imagen denominada como el “hombre árbol”, siendo el punto principal del panel derecho, que enseña a los castigados. Posee la forma de una cabeza humana, acompañada con un torso cavernoso, donde aparecen tres personas sin vestimenta, que están sentadas encima de un animal, y se encuentran rodeando una mesa.

Siglo XVII: La pintura de la fresa

Durante el siglo XVII, la pintura fue conocida como la pintura de la fresa, la descripción, ocurre al destacado colgante que aparece en el panel central. Se pueden apreciar, fresas esparcidas por varias partes de la obra, transformándolas como un argumento frecuente dentro de la pintura. Existe un evento donde se observa una pareja que come fresas; mientras que en otra parte, las personas toman manzanas de un árbol, al tanto que un hombre le brinda una fresa a una mujer.

Existen diversas interpretaciones de las fresas que aparecen dentro de la pintura. Por su cantidad de semillas, hacen alusión a la promiscuidad, o probablemente a la costumbre católica de personificar el renacimiento y el buen comportamiento.

Su interpretación y diferentes académicos

La obra el jardín de las delicias durante siglos ha desafiado, lo que muchos académicos se preguntan, ¿Qué significado tiene todo esto?, especialmente por no contar con información suficiente que narra quién era El Bosco.

El famoso historiador del arte alemán, Erwin Panofsky, acerca de la obra, en una oportunidad plasmó lo siguiente: “A pesar de todas las investigaciones ingeniosas, sabias y en su mayoría de gran utilidad, dedicadas a la labor de ‘describir a Jheronimus Bosch’, no puedo impedir sentir, que el auténtico secreto de sus majestuosas pesadillas y sueños aún no se ha revelado. Hemos realizado varios orificios en la puerta de la habitación cerrada; pero no luce que hayamos descubierto la llave”.

Algunos, lo interpretan como una leyenda del desplome de la gracia divina, al tanto que otros lo observan como una auténtica utopía. Esta pintura, es tan misteriosa, interesante y que llama a sus seguidores a develar su misterio, que existe actualmente un sitio web, orientado a observar minuciosamente El jardín de las delicias, mediante una óptica cabalística.

Es probable que jamás se encuentre el verdadero significado, pero, la búsqueda de las figuras en esta enigmática pintura forma parte del compartir divertido.

La pintura: En el museo del Prado

El misterioso cuadro, fue colocado dentro del museo del Prado, durante la guerra civil española. El jardín de las delicias, fue llevado a España, luego de que el rey Felipe II, lo obtuviera mediante una subasta en el año 1591. La obra fue expuesta en su hogar, el Escorial.

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La obra de arte, representa una pieza emblemática de la colección existente en el Museo del Prado desde el año 1939. Las autoridades, lo transportaron desde el Escorial para cuidarlo, en la época de la guerra civil española, y a partir de ese momento, forma parte de la colección.

En el año 2014 hubo un altercado que intimó con retirarla del Prado, sin embargo, hasta la presente no ha existido un convenio que permita que la distinguida pintura permaneciera en el museo.

Influencia en los pintores surrealistas durante los años 1920

Entre los famosos pintores que existen en el mundo del arte, se encuentran Salvador Dalí y Joan Miró, artistas que observaron desde cerca en el museo del Prado, a maravillosa obra, y luego se concretaron a ejecutar obras de pintura haciendo honor la obra de Bosch.

Una vez que reproducen figuras con carácter sexual y especies de animales mezclados, recordando al ingenioso pintor holandés.

Historia

Así como otras obras de El Bosco, el artista no acostumbraba a fechar sus pinturas, por lo que muchos especialistas les ha tocado hacer un estimado estudiando la edad de los paneles de madera, así como la imagen de una piña, siendo una fruta del Nuevo Mundo, lo que indica que quizás fue pintada luego del viaje de Cristóbal Colón a América. Se considera que fue plasmada entre los años 1490 y 1510.

Muchos expertos mantienen que la obra tiene carácter juvenil, mientras que otros consideran que se trata de una obra de madurez. Entre los que se encuentran, Baldassare Galuppi, compositor veneciano y otros, la colocan en la época joven de El Bosco, año 1845.

Mientras que Charles de Tolnay nacido como Károly von Tolnai, historiador de arte húngaro, y Nellallitea Larsen, novelista mestiza del Renacimiento, la ubicaban a los finales de la labor de El Bosco, para los años 1514 y 1515.

Los estudios y análisis dendrocronológicos, que es la ciencia encargada de estudiar los anillos de las plantas, efectuados al roble de las tablas, indican una data entre los años 1460 y 1466, otorgando un terminus post quem para la ejecución de la obra.

En el catálogo que existe sobre la exposición del artista, llevada a cabo en Róterdam en el año 2001, indica la fecha entre los años 1480 y 1490. En la guía llevada como control de visitas, que ha sido editada por el Museo del Prado, muestran los años 1500 a 1505. El cuadro fue observado por el primer biógrafo de El Bosco, conocido como Antonio de Beatis, en el año 1517.

Más tarde, la pintura fue heredada por su primogénito René de Châlon, mientras que el sobrino de Enrique, fue quien luego la heredó, Guillermo de Orange, jefe del levantamiento holandés, en contra de la corona de los Habsburgo.

Esta fue decomisada por el duque de Alba, durante la época de la guerra de Flandes, la que se registró en el inventario ocurrido el 20 de enero de 1568. El duque, dejó a cargo la pintura, en manos de don Fernando, su hijo natural y clericó de la orden de San Juan.

Felipe II, obtuvo el tríptico en la almoneda de los bienes de don Fernando, y fue enviada al monasterio de El Escorial en fecha 8 de julio de 1593, que además la detalla como “Una pintura en tabla al óleo, con dos puertas, de la variedad (sic) del mundo, cifrada con diversos disparates de Hieronimo Bosco, que llaman Del Madroño

Luego el religioso José de Sigüenza, en cuanto a su historia de la Fundación del Monasterio de El Escorial, entregó un extenso detalle e interpretación de “La otra tabla de la gloria vana y breve gusto de la fresa o madroño, y su olorcillo, que apenas se siente, cuando ya es pasado, es la cosa más ingeniosa y de mayor artificio que se pueda imaginar”

Luego quedó registrado en el inventario del año 1700 como una obra de “la creación del mundo”. El pintor y escritor español Vicente Poleró, en el año 1857, realizó la publicación de los cuadros del Real Monasterio de San Lorenzo, denominado del Escorial, lo titula De los deleites carnales.

Desde entonces, se inicia su actual título Jardín de las Delicias o De las delicias terrenales. El cuadro fue llevado al Museo del Prado en el año 1939, con el fin de ser restaurado.

Sobre El Bosco

El autor de la obra artística a quien llamaban El Bosco, su auténtico nombre era Jheronimus van Aken, igual conocido como Jheronimus Boch o Hieronymus Boch. Nació en el año 1450 en la ciudad de Hertogenbosch o Bois-le-Duc, Bolduque, capital de la provincia de Brabante Septentrional, en el sur de los Países Bajos. Su crianza se desarrolló en un linaje de pintores, y se transformó en un representante de la pintura flamenca renacentista.

La realidad es que no hay mucha información acerca de la vida del pintor, le colocó su rúbrica a escasas pinturas, mientras que ninguno fue fechado de su mano. Muchas de sus obras artísticas, se le han señalada a su autoría, luego de su fallecimiento, y tras exhaustivas experticias. Lo que sí se conoce, es que Felipe II, fue un gran coleccionista de sus obras, y que fue tanto que le encargó una pintura relativa a El juicio final.


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