Claudio Cerdán es uno de los nombres fulgurantes en el género de la novela negra en lengua hispana. Expongamos brevemente su biografía y obra.
Claudio Cerdán, prolífica búsqueda de una voz
Nacido en 1981, Claudio Cerdán representa el esfuerzo constante de un autor sin temor de someterse a continuas metamorfosis creativas para llegar a su terreno estético más cómodo. Desde 2012 hasta los momentos, Cebrián ha mantenido un ritmo notable de publicación de una o dos novelas por año, acumulando trece novelas. Cualquiera que se haya visto poseído por la pasión de escribir sabrá la hazaña que supone tal entrega.
Cerdán se inició con entusiasmo en el género fantástico, escribiendo una seguidilla de títulos como El dios de los mutilados y Cicatrices, con resultados un tanto grises. Pero pronto encontraría una mina de oro en la novela negra, uno de los géneros literarios estrella del territorio español. Se sucederían con éxito entregas de este estilo como El país de los ciegos, Cien años de perdón, Un mundo peor, El club de los mejores y Los señores del humo, entre varias otras.
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Cerdán acogería otra transformación estilística en la novela La revolución secreta, una incursión tan oscura como sus anteriores trabajos en la novela histórica, ambientada en Rusia al final de la Revolución Bolchevique. En el siguiente vídeo, Cerdán presenta esta obra de 2014.
Una obra exploratoria, incorrecta y desencantada
Claudio Cerdán ha desarrollado un estilo que podría considerarse salvaje. Su narración en ocasiones parece venida de la boca de un sujeto con varias sustancias en su cuerpo, con un chute de speed en el cuerpo, como afirma en una entrevista: una voz que se agita con comentarios cínicos y reniega de los personajes.
Naturalmente, Cerdán rechaza la corrección política imperante en la cultura actual, que abarata el concepto de la ofensa. Sus personajes son abiertamente antiheroicos, como es usual en el género, llenos de fallas, adicciones y problemas crónicos de salud. El autor ha desafiado en broma a cualquier juez para que cancele sus novelas, considerándolo la mejor promoción para su obra.
El carácter cruento de sus tramas no se queda atrás en incorrección. Un asesino serial que recorre Madrid decapitando a sus víctimas activa una trama de tres líneas cruzadas en Los señores del humo. Un maníaco ex convicto vuelve para amenazar a un violento criminal acosado por mafias en El país de los ciegos. Y un asesinato múltiple deberá ser resuelto por un inspector en el peor momento de su reputación en Cien años de perdón.
El resultado ha sido la aclamación crítica con sucesivos premios como el Novelpol de 2012, el Premio Ciudad de Santa Cruz de 2014 y el Premio Negra y Mortal de 2019. Cerdán también ha podido someterse a una nueva transformación, dedicándose al mundo del cómic en Toxic Detective.